26/10/08

Reivindicación de La Araceli


Hace un par de años, Araceli Saavedra puso en Olavarría una financierita. El negocio era simple: se corría el rumor de que la mina pagaba altas tasas de interés . La clave era el rumor, no había propagandas de nada. El boca en boca es la mejor publicidad, tiene algo de clandestino que lo hace mucho más confiable.

Era verdad. Pagaba altísimas tasas de interés (82% llegó a pagar, más rentabilidad que soja de junio, QEPD). Era un sistema muy bien descentralizado: Araceli no tenía muchos cobradores, pero la gente que salía con el 80% de lo que ponía la recomendaba con todos los vecinos. Así el negocio se incrementaba a pasos agigantados. No faltaron los maliciosos que hablaban de bicicletas. Araceli pagaba con la guita de los nuevos, a los viejos aportantes. Así, sucesivamente.

Un día, el sistema estalló. La Araceli, como ya era conocida, no pudo pagar más. El sistema, a la larga, se recalienta. Un rumor hace que muchos saquen la guita todos juntos, o que muchos vayan a poner, y La Araceli ya no puede responder. Araceli Saavedra hoy está presa.

¿Cuál fue su delito? El delito de la Araceli fue no contar con todo el aparato institucional que la respalde. Ser una cuatro de copas.

La Araceli no tiene ni este diario, ni este otro, que le haga lobby por sus intereses. Porque La Araceli no ponía guita en los programuchos de cable, ni en los pasquines. Era una estafadora popular. Araceli no tuvo quien le abra un blog defendiendo su estafa, ni un señor peladito y de bigotitos que, con palabras grandilocuentes, diga lo necesario que es estafar al público para mantener intactas las reglas del juego.

Desde acá, Araceli, te bancamos. En la cárcel en la que estés abrirás un diario y verás en las noticias de hoy la injusticia de saber que lo único que diferencia a un estafador de otro es la capacidad de legitimación de la estafa. Para la próxima, ya lo sabés: a las estafas hay que institucionalizarlas y, mágicamente, pasan de ser un delito a un "sistema de capitalización". Si hasta el nombre es más bonito y todo.

8 comentarios:

Mario Paulela dijo...

Qué buen post! Y cuánta razón tenés! La diferencia, claro, además de los Medios, es la escala. Pero a la larga, es la misma estafa.
Muy bueno
Saludos
MP

Anónimo dijo...

Very good......

Goliardo dijo...

Muy lindo, y a la vez tan real. Parte del monopolio, solo unos pocos pueden dedicars ea un sistema financiero.

Charlie Boyle dijo...

Sabe que acá hubo un caso igual dea La Araceli, solo que todavía no fue en cana, promete devolver los fondos.
Lo que todo el mundo se pregunta donde se fueron, millones de pesos...
Por lo pronto la ilusión de ganar el ... en dólares semanales no se lo quitan a los acreedores.
Averigue y cada pueblo, cada ciudad tiene una Araceli.
Un abrazo

Tomás dijo...

MP: totalmente de acuerdo. La única diferencia es que las AFJP reparten llaveritos y remeras y la cara visible es Pancho Ibañez (¿se acuerdan de Tiempo Siembra?).

Gracias Goliardo.

Charlie: sí, conozco varios casos de financieritas. Es un negocio pavo, los primeros cien, doscientos, si son vivos y salen rápido ganan algo de plata.

Bologger dijo...

La Araceli debería haber visto esto antes:
http://ahoratiroyo.blogspot.com/2008/10/para-entender-la-crisis.html

El Grito Primal dijo...

Que buena entrada, me encantó.

Tomás dijo...

Gracias cumpas Bologer y Ex anónimo. Creo que la Araceli podría ser nuestra líder mediática anti-AFJPes.

Aunque María América mide y mucho.