1. Queremos una Argentina socialmente justa, económicamente libre y políticamente soberana. Y sino se puede siempre puede haber gatillo fácil, entrega del patrimonio y ajuste al rolete.
2. El denarvaísta trabaja para el movimiento. El que en su nombre sirve a un círculo o a un caudillo, no tiene más que venir a sentarse y negociar una colectora.
3. No existe para el denarvaísmo más que una sola clase de hombres: nosotros, los ricos. Los demás son prescindibles.
4. En la Nueva Argentina el trabajo es un derecho, y es un deber, porque es justo que cada uno proudzca por lo menos lo que consuma. El denarvaísmo no quiere saber más nada con importar efedrina: manos a la obra, argentinos, un laboratorio por casa es la consigna.
5. Para un denarvaísta no puede haber nada mejor que otro narco.
6. Ningún denarvaísta debe sentirse más de lo que es y menos de lo que debe ser. Cuando un denaravísta comienza a sentirse más de lo que es, levantamos el teléfono y le bajamos la candidatura a la mujer.
7. En la acción política, la escala de valores de todo denarvaísta es la siguiente: primero, el que pone la billetera (o sea, yo); después, Capital Federal, y luego, la pata peronista.
8. La política no es para nosotros un fin, sino sólo el medio. Por eso me compré América 2 y pongo toda la torta para que me filmen en el fóbal y me hagan amigable en Gran Cuñado.
9. Los dos brazos del denarvaísmo son el menemismo y el duhaldismo. Un abrazo que nos dejen darle al pueblo, y terminan todos en pelotas y pasados de efedrina.
10. El denarvaísmo anhela la Unidad Nacional y no la lucha. Desea héroes, pero no mártires. Por eso todavía no boleteamos a Segovia.
11. La verdadera democracia es aquella donde el gobierno hace lo que los grupos económicos quieren y defiende un sólo interés: el de Casa Tía.
12. El denarvaísmo es esencialmente popular. El denarvaísmo no entiende bien qué quiere decir esencialmente ni, mucho menos, popular. Pero a los asesores les gusta esta frase así que va.
13. En la Nueva Argentina los únicos privilegiados son los ricos. Los demás que trabajen que por eso no son ricos. O sea que, una vez trabajando, serán ricos; ergo, privilegiados. A menos que hayan trabajado en Casa Tía.
14. Un Gobierno sin un plan es un cuerpo sin alma. Por eso el denarvaísmo tiene una doctrina política, económica y social: el menemismo enjuagado con tatuajes y muchos asesores de imagen.
15. El denarvaísmo es una nueva filosofía de la vida, simple, práctica, popular, profundamente narco, profundamente rica y profundamente plagada de celulares.
16. Como doctrina política, el denarvaísmo...tiene un plan.
18. Como doctrina social, el denarvaísmo realiza la Justicia Social, que da a cada persona su derecho en función social: a los negros, bala; a los ricos, hipermercados. Al resto, celulares.
19. En esta tierra lo mejor que tenemos es el Pueblo. Pero en la tierra colombiana, hay cosas mejores que salen de la tierra, y sobre todo, se venden mucho más caras.
20. Constituimos un hipermercado centralizado, organizado y con muchos empleados libres. Libres de indemnización y derechos laborales.
3 comentarios:
excelente el post compañero, un abrazo
¿Cuándo siguen las entradas Timoteras? Son de gran calidad, vamos, que nos impacientamos.
Abrazo
Julián
¡Abajo ya hay otra!
Publicar un comentario