28/7/08

La causa del "sacrificio incomprensible"


"Recuerdo muy bien que estuve muchos días tristes cuando me enteré que en el mundo había pobres y había ricos; y lo extraño es que no me doliese tanto la existencia de los pobres como el saber que al mismo tiempo había ricos.

El tema de los ricos y los pobres fue, desde entonces, el tema de mis soledades. (...) Me faltaba sin embargo, todavía, dar un paso más en el camino de mis descubrimientos. Yo sabía que había pobres y que había ricos; y sabía que los pobres eran más que los ricos y estaban en todas partes.(...)

Hasta los once años creí que había pobres como había pasto y que había ricos como había árboles. Un día oí por primera vez de labios de un hombre de trabajo que había pobres porque los ricos eran demasiado ricos; y aquella revelación me produjo una impresión muy fuerte. (...)

Con aquél último paso había llegado a conocer la tercera dimensión de la justicia social.(...)

La mayoría de los hombres y mujeres saben que hay pobres porque hay ricos pero lo aprende insensiblemente y tal vez por eso les parece natural y lógico."

La Razón de mi vida.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Buen homenaje, la Evita del pelo suelto, qué foto.

Tomás dijo...

Sí, por suerte los medios tienen un escaso conocimiento histórico. Pero el otro día en el acto de Cristina estuvo esta imagen atrás y fue toda una declaración para quien la supo ver.

(Para evitar pavadas: Cristina no es, ni por asomo, Evita).