28/12/09

Cómo cambiar una lamparita



- ¿Cómo hace el kirchnerismo para cambiar una lamparita?

Néstor empieza a los gritos porque se le cortó la luz y no terminó de leer el libro de contaduría de Techint del año 1834, agarra un fluorescente y, sin cortar la luz, lo quiere enroscar donde va la lamparita. Recibe un golpe de mil kilovatios, cae pesadamente sobre el piso, se levanta y asegura que, a pesar de que sacó una lamparita, ahí tiene que entrar el tubo fluorescente. Carta Abierta emite un comunicado denunciando el Clima Fluorescente. La centro-izquierda le recomienda a Néstor que se apoye sobre ellos para cambiar el foco, y le arrojan un banquito de quince centímetros luego de que Néstor les haya dado el Ministerio de Construcción de Banquitos.

- ¿Por qué los troscos no pueden cambiar la lamparita?

Los troscos discuten en mil asambleas de seis personas la pertinencia de contratar un electricista. Luego de una seguidilla de rupturas -la más poética, aquella que declara traidor a la clase obrera al pulpo capitalista Tomás Alva Edison - el ala más numerosa decide que no está tan mal contratar un electricista. Cuando el electricista, en overol manchado y con varias herramientas, llega a cambiar el foquito, miles de troscos rompen en llanto al ver un obrero en vivo y en directo y terminan por comerse al mismo para sentir adentro el espíritu proletario.

- ¿Cómo hace Claudio Lozano para cambiar una lamparita?

Claudio eleva su barba al cielo y entona: "yo soy la luz del mundo/ no hay tiniebla junto a mí/ tendrán la luz de la vida/ por la palabra que les dí". La luz sigue apagada, Claudio mira atentamente el foco quemado y dice: "hágase la luz". Inmutable, el foco continúa apagado y Claudio denuncia un hiperrequetesuperarchimegafabulantástico negociado de Lázaro Báez con la Osram. Ofuscado, compra un farol a carbón fabricado por pequeños y medianos fabricantes de faroles a carbón anti-contaminación que, por supuesto, gasta el triple y da la mitad de luz. Pero Claudio es feliz así. Las reuniones del Grupo A, por falta de luz, se trasladan a lo de Macaluse.

- ¿Cómo hace el Rabino Bergman para cambiar una lámpara?

Lo importante no es la luz, sino no perder el foco.

- ¿Cómo hace Gaby Michetti para cambiar una lamparita?

Contrata una cuadrilla de neonazis que golpea salvajemente a todos los judíos que se encuentran en el camino hasta lo de Gaby, luego cambian la lámpara con una sonrisa en la boca y muy buena onda, y cuando se retiran, tanto Gaby como la basura de Rozitchner aseguran que fue un error contratar a los nazis, y que las cosas hay que hacerlas bien y no mal porque eso es política.

22 comentarios:

Colo dijo...

El final a lo Patrick Suskind de los troscos, sublime.
Todo bueno, como siempre.

Nicolás Tereschuk (Escriba) dijo...

Viral !!

Horacio Gris dijo...

Groso

Anónimo dijo...

Excelente!!

polycarpo dijo...

ex-ce-len-te

Unknown dijo...

Bueno, será a costa de algunos judíos, pero en tu cuento la única que cambió la lamparita fue Gabriela.
Que seguramente contrató a su pandilla vía twiter.

Charlie Boyle dijo...

¿Cómo hace Biolcatti para cambiar una lamparita?
Sube al techo ( o al piso de arriba según el caso). Con un martillo neumático de 120 Kjoules hace un agujero alrededor de donde pende la lamparita en el piso de abajo.
Cuando finalmente se desprende la mampostería tapa el agujero con un grupo electrógeno "autónomo" que funciona gracias a la subvención que le da el estado en el gasoil para el campo

Mauri Kurcbard dijo...

Otra Tomaseada.

Unknown dijo...

Genial! creatividad a full!!!

saludos y felicidades!

Adal

Gerardo Fernández dijo...

Sos un genio!!!!
Esta noche lo leo y mañana en Cooperativa también

Silvia Ca dijo...

Buenisimo!!

celina dijo...

buenísimo!!! jaja

MM dijo...

Muy bueno!

Pero para mí que Néstor para cambiar la lamparita contrata a Electroingeniería. Luego la empresa Nacional y Popular en agradecimiento por tan atinada decisión estratégica le alquila un monoambiente en Río Gallegos a 25 mil mangos el mes.

Pero no sé, no estoy seguro. Tal vez sean 30 mil los pesitos.

Saludos y buen año!

Marcelozonasur dijo...

Jaja, muy bueno.

A los 44 del segundo metiste un zapallazo de 35 metros y clasificás para mejor post creativo del año.

"megafabulantástico" jajaja

Anónimo dijo...

Un cago de risa.

Excepto cuándo te metés con Nuestro Señor Claudio, con eso no se jode che :P

Anónimo dijo...

Mucha universidad lo tuyo que seguis con la chicana peroncha de que los troscos no conocen obreros, eso quedo en el ´70 padre y ni siquiera era tan cierto...

Habria que ver que coño pasa entonces en el subte, en Kraft, en Bosch, en la linea 60, en EMFER, en Ecotrans, en las comisiones internas graficas, en Massuh, en Malhe, y en otros muchos etc...no se...la verdad...

Igual te falto una Diana Conti en el post...:P

rinconete dijo...

Muy bueno!

Ojo, es cierto lo que dice el Anónimo sobre los troskos. Vilma Ripoll sin ir más lejos, se cruzó con varios proletarios en la Rural cuando fue a festejar el fin de la 125.
Eran los encargados de armar los palcos.

Anónimo dijo...

Tenés razón Anónimo, en el Gran Buenos Aires el troskismo la sigue rompiendo. Hubo como 2000 obreros que votaron a Ripoll y/o Pitrola.

ram dijo...

A lo mejor no, Rinconete, a lo mejor la vilma cambia ella la lamparita, para congraciarse con su amiguito biolcatti y así producir el milagro del trosko que sirve para algo (algo lamentable, claro, pero ese es su estilo distintivo)
Saludos y un buen 2010

desvinchado dijo...

Genial Tom, como siempre. Aunque esta vez el de los troscos supero a Lozano que es tu acto mas fuerte (recuerdo cuando Lozano llama al delivery para pedir empanadas!!!)

Anónimo dijo...

Es realmente muy gracioso.
Te felicito jejey!!

Anónimo dijo...

Muy bueno el post! Muy pero muy divertido y acertivo!
A quién dice q lo de los trtoskos no es cierto, yo opino lo mismo. Los troskos resucitan a Tosco y enseguida les cambia la lamparita.